Señor Jesús, Hijo de Dios, ven a compartir con nosotros la cena de los amigos. Haz que unidos en comunidad podamos celebrar el amor que Tú nos tienes. Que seamos capaces de crear gestos de gratuidad, donde poder disfrutar del perfume del encuentro y de la fiesta. Y desde esa experiencia de fraternidad, aumenta en nosotros la compasión y la misericordia para abrir nuestras puertas a los excluidos y a cuantos sufren. Enséñanos a hacer de nuestra vida diaria una eucaristía solidaria; a partir el pan de nuestro trabajo, de nuestros desvelos; a hacernos humanos y sencillos en la mesa que nos hace hermanos. Ayúdanos a comprender que no hay respuestas al dolor si no lo palpamos, lo abrazamos, lo ungimos… y que podamos, contigo, seguir diciendo: “Padre NUESTRO…”
Para Jóvenes de 8 a 100 años....