Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas de septiembre, 2008

Los Arcángeles

Los arcángeles constituyen uno de los nueve coros de coros de ángeles. Dios ha encomendado a los arcángeles las misiones más importantes en relación a los hombres. Son guardianes de personas a quién Dios ha confiado grandes misiones, como del Santo Padre, ardenales, obispos. Según las Sagradas Escrituras hay siete arcángeles: "Yo soy Rafael, uno de los siete ángeles que tiene entrada a la gloria del Señor" (Tb 12:15) "Reciban gracia y paz de Aquel que Es, que era y que viene de parte de los Siete Espíritus que están delante de Su Trono" (Ap 1:4). Las Sagradas Escritura mencionan el nombre de solo tres: Miguel (Ap 12:7-9), Gabriel (Lc 1:11-20; 26-38) Rafael (Tobit 12:6, 15). Los nombres de los otros cuatro arcángeles (San Uriel, San Barachiel ó Baraquiel, San Jehudiel, Saeltiel) no aparecen en la Biblia . Se encuentran en libros apócrifos de Enoc , el cuarto libro de Esdras y en la literatura rabínica. La Iglesia reconoce los nombres que se encuentran en las Sa

Análisis del Año Paulino por el teólogo y ecumenista P. Pedro Langa Aguilar

San Pablo no es historia pasada, sino que quiere hablar con nosotros hoy. De ahí que debamos mirar con él «hacia el futuro, hacia todos los pueblos y todas las generaciones». Aspectos destacables suyos, hay muchos. El Papa subrayó tres: su amor a Cristo y su valentía predicando el Evangelio; su experiencia de la unidad de la Iglesia con Jesucristo, y su conciencia de que el sufrimiento va inseparablemente unido a la evangelización. Del primero cabe decir, efectivamente, que la fe de Pablo en Gálatas «es la experiencia del ser amado por Jesucristo de manera totalmente personal… Su fe es el impacto del amor de Dios sobre su corazón, cuya experiencia le empujó a través de las dificultades. Pablo era alguien capaz de amar, y todo su obrar y sufrir se explica a partir de este centro». Su fe consiste en ser conquistado por el amor de Jesucristo, un amor, éste, que lo conmueve en lo más íntimo y lo transforma. No es su fe, por eso, una teoría, una opinión sobre Dios y sobre el mundo. Opinione