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El amor es el camino mejor

No hay nada que lo supere. Parece que escuchamos nuevamente a San Pablo y que a cada uno nos dijera al oído: Tú sueñas grandezas, hazañas, aventuras… anhelas un ideal que hierva en tu sangre y rompa todos los condicionamientos preestablecidos… quisieras escalar alturas para llegar a las más altas cimas o alcanzar los más remotos confines… Tú anhelas subir más allá de las nubes para alcanzar las estrellas, mirar el mundo desde allí y contemplar el cosmos en toda su extensión y belleza. Dices que estás disponible para afrontar cuanto sea necesario con tal de llegar hasta el triunfo; tienes muchas ilusiones, mucho ímpetu y un gran anhelo… Pero ven, siéntate un momento y escúchame: te enseñaré un camino más elevado y sublime, el camino del amor. Yo sé que tú anhelas amar, pero tan vez todavía no sabes cuál es la parte del amor que te está reservada en la vida. No importa si a ti te han amado poco: tú puedes buscar, intentar, aprender… decídete hoy a abrir el corazón para encontrar en su c...

El elogio del amor

Las primeras palabras del Apóstol san Pablo en el capítulo 13 de la primera cara a los Corintios son de una elocuencia extraordinaria orientadas a hacernos comprender la grandeza, la belleza y la importancia suprema del Amor. Podemos mirar en torno, mirar hacia dentro o curiosear hacia fuera; podemos escudriñar el pasado, repasar la historia entera o predecir el futuro… y en ningún lado encontraremos nada más grande y hermoso que el amor. El Amor es de todos los tiempos, las personas de cualquier lugar o época, tienen todas la misma tarea y el mismo compromiso: vivir el Amor. Para cualquier habitante de nuestro planeta, chico o grande, rico o pobre, ignorante o sabio, será idéntico el problema si vive en el amor o en el desamor. La mayor ciencia, el mejor regalo y la máxima sabiduría se sintetiza en el amor. Podemos continuar la lista comparando el Amor con lo que queramos, con teorías filosóficas o fantasías modernas, pero siempre encontraremos la primacía del Amor que lo supera todo...

La cruz

En ese trato muy fraternal con sus colaboradores, hemos descubierto otra dimensión de sus valores humanos. ¡Ojalá nosotros los evangelizadores del siglo XXI, supiéramos aprender de su magistral lección en cuanto a relaciones humanas con los colaboradores y saberlos involucarar de lleno en nuestras actividades apostólicas. Y ahora le invito a hablarnos de otro tema fuerte de su vida en Cristo: la Cruz, un ingrendiente muy común en nuestro menú diario. De acuerdo a la lógica del Evangelio usted considera la cruz como un valor en contraste con la lógica humana que la rechaza, hasta el punto de que algunos de sus biógrafos hablan de su locura por la Cruz de Cristo. ¿Qué opina de esa apreciación de sus biógrafos? En verdad, yo prediqué con “locura” la Cruz de Cristo. Efectivamente Cristo me envió a proclamar el Evangelio, no con los discursos sofisticados de la elocuencia humana. En tal caso la Cruz de Cristo ya no tendría sentido. Porque el lenguaje de la Cruz resulta una locura para los q...

El Evangelizador

Al ver su biografía, nos sorprende esa fuerza que tiene para defender sus valores. Sobre todo, la gran facilidad de evangelizar, deja sorprendida a nuestra juventud. Tomando de usted el ejemplo de esa fuerza y coraje para llevar el Evangelio por todas partes, un joven sacerdote, llamado Santiago Alberione, fundó hace noventa años, una institución llamada Familia Paulina, cuyo fin es difundir la Palabra de Dios. El pidió la protección de usted, lo tomó como modelo ¡y no le fue nada mal! ¿Qué le diría usted a la juventud que admira a Alberione y quiere seguir el ejemplo de Pablo evangelizador y que está comprometida para llevar el Evangelio al mundo entero? Yo Pablo, siervo de Cristo Jesús y apóstol por un llamado de Dios, escogido para anunciar el Evangelio de Dios, saludo a la Iglesia de Dios que está en Venezuela y sobre todo a los jóvenes cristianos que viven en esa tierra de gracia, bendecida por Dios. Reciban la bendición y paz de Dios Padre y de Cristo Jesús, el Señor. Doy graci...

Para mí la vida es Cristo

Contemplando la vida de San Pablo , su obra de apostolado, nos damos perfecta cuenta de que no se comportó como el trabajador asalariado que cumple sus horas de labor y luego se dedica a otras actividades marginales. Para él no había horario ni calendario, todas sus horas y todos sus momentos estaban dedicados a la misión que Cristo Jesús le había encomendado. A tiempo y destiempo, su principal empeño era predicar la Palabra de vida que da la Salvación. A Pablo no le importó el cansancio, el desgaste o las fatigas; no le asustaron los peligros, ni se echó atrás ante las tribulaciones. Escuchemos a San Pablo: Cuando estábamos con ustedes presentíamos ya que íbamos a sufrir dificultades y tribulaciones, y es lo que ha sucedido, como bien lo saben. Carta a los Tesalonicenses 3,4 Pero todo lo superamos gracias a Cristo Jesús que nos ha demostrado su amor. Carta a los Romanos 8,38 De sobra sabemos que en todo interviene Dios para el bien de los que le aman. Carta a los Romanos 8,28 Estoy c...

Me he hecho todo para todos

El Apóstol Pablo ha sido un gran bien para la humanidad. Era estupendo en su coherencia y en su capacidad de hacerse “todo para todos”. En su juventud, como judío convencido, lleva adelante los ideales de la antigua Ley, llegando a perseguir a los que no la observan. Se convierte en el camino de Damasco, cuando viajaba para encarcelar a los cristianos. Allí tiene una profunda experiencia de Cristo y se identifica plenamente con sus enseñanzas. Después de dos años de silencio y de meditación en el desierto, recorre el mundo conocido para llevar a todos la salvación y la libertad de los hijos de Dios. Con los paganos se hace pagano; se identifica con ellos en lo que tienen de bueno para, luego, proponer la novedad que ha traído Cristo. No se adaptó a las modas. No buscó su propio interés. Se solidarizó con la gente, “llorando con el que llora y riendo con el que ríe”, para ganarlos a todos para Cristo, para conducir a los demás al Otro, al Hijo de Dios, que se igualó a nosotros el prime...