La oración es indispensable para el desarrollo de la personalidad, es un acto de madurez, es el medio más importante para la rehabilitación y paral a reconstrucción de la personalidad, es la relación personal y viva con el Dios verdadero. Si pudiésemos hacer una división, sería ésta: Padre Nuestro que estás en el cielo, en el sentido de alabanza y, a continuación las siete peticiones. Jesús enseñó a sus discípulos tiene una huella de la paternidad de Dios en todas las peticiones. Padre Nuestro que estás en el cielo: Fue Jesús quien nos enseñó a llamarle Padre. En el AI Dios quería que lo llamasen Yahveh. Padre, porque es creador; Padre, porque, al contrario de los padres terrenos que dan la vida mortal, El da el Espíritu. Esto no quiere decir que no sea un Padre con actitudes profundamente humanas. Los judíos no utilizaban la expresión Dios Padre, pero Jesús reveló al Padre. Por eso, podemos llamarlo así siempre que oremos. Padre Nuestro, y no "mi Padre". Es padre de todos, ...
Para Jóvenes de 8 a 100 años....